Desde el año 2004 la apuesta decidida por los alimentos de la provincia se perpetuaron en un marchamo de calidad denominado Alimentos de Zamora, una marca sujeta a unos parámetros de seguridad alimentaria que dan al consumidor final una garantía concreta. Las diferentes secciones en las que se agrupan en este momento (D.O. Denominaciones de Origen, I.G.P. Indicaciones Geográficas Protegidas o Marcas de Garantía) mantienen perspectivas de crecimiento ya que son bastantes los im- plicados en estos grupos de marcas de calidad.
La Diputación Provincial de Zamora es la institución que mantiene el impulso de “Alimentos de Zamora” bajo la que se reúnen 13 productos de prestigio.
El vino es protagonista de excepción en los alimentos por excelencia en la provincia de Zamora que cuenta con tres Denominaciones de Origen y una Denominación de Origen Protegida. Desde la histórica D.O Toro, referente vitivinícola español, con uvas únicas como la Tinta de Toro, hasta la D.O Arribes del Duero que agrupa a 47 municipios, cerca del discurrir fronterizo del río Duero y con su especial variedad como es la “Juan García”; continuando por la D.O Tierra del Vino, que engloba vinos se afianzan en un clima especial a veces de extremos. También forma parte de este grupo la D.O.P Valles de Benavente, comarca al noroeste de la provincia que aporta una variedad de uva exclusiva y de excepción sin igual como es la Prieto Picudo.
Dentro de los alimentos de calidad el queso es el otro gran abanderado de Zamora, ya que la provincia es la que tiene mayor presencia de ovino de leche en la que se elabora un producto que une la tradición y modernidad. Además, cuenta con una feria especial conocida como Fromago que ha tomado protagonismo internacional tras su primera edición de éxito. El Queso Zamorano es reconocido en España por su sabor y considerado uno de los mejores del mundo.
La marcada tradición harinera de la provincia se aglutina hoy día en la Harina Tradicional Zamorana, otro producto que llega desde los grandes campos de cereales de una provincia marcada por la agricultura y la ganadería. Cada plato elaborado con este producto dota a los mismos con un sello personal de excepción.
Las grandes explotaciones ganaderas con excelentes materias primas y tratadas con esmero por los ganaderos zamoranos llevan a contar también con otros alimentos que se encuadran en el marchamo de calidad zamorano. El Cordero Lechal, de carne blanca o rosada de raza churra, castellana y ojalada, es alimentado casi en exclusiva con leche materna lo que le otorga una extrema delicadeza en su textura y sabor, algo propio de la I.G.P Lechazo de Castilla y León.
La Ternera de Aliste es una raza autóctona del oeste de la provincia de Zamora. Su carne especial con carácter único hace que en las explotaciones que cuidan y garantizan la calidad en su crianza dejen la impronta en la especialidad de sus asados y guisos y claramente en su distinguido sabor.
El Chorizo Zamorano marca también una tradición, elaborado con la mezcla de la carne de cerdo graso de capa blanca, con pimentón de la Vera y hierbas aromáticas, colocan a este alimento en la base de las tablas de embutidos.
Los campos del noroeste de la provincia avalan también productos como los afamados Pimientos de Fresno Benavente, carnosos y brillantes, rojos por excelencia. Las Setas de Castilla y León que crecen en los bosques al pie de robles o jaras, de pinos y castaños, crean un universo micológico que es delicatessen en los platos de la alta cocina y de los guisos más tradicionales.
El Garbanzo de Fuentesaúco de pequeño tamaño, pero de inigualables cualidades, es un producto que mantiene una excepcional prensa, un sabor y textura especial y con característica mantecosidad y finura. Entre las legumbres también en la familia de alimentos de Zamora la Lenteja de Tierra de Campos, pequeña, pero con una tradición en guisos y ensaladas. Un alimento más que se plantaba en mesas desde tiempos pasados y que ahora forma parte a su vez de la nueva cocina y los elaborados platos de chefs internacionales.